25 AÑOS DE CEMINA

BODAS DE PLATA DEL ACOMPAÑAMIENTO MISIONERO DEL CEMINA EN ECUADOR

Mos COBCuando estamos acostumbrados a festejar bodas de plata, oro, diamante o aniversarios que marcan hitos históricos de los quehaceres de la vida, de asociaciones o instituciones.

                Hoy queremos resaltar los 25 años de vida desde el nacimiento del CEMINA en la Iglesia Ecuatoriana. Muchos se preguntarán ¿Qué es el CEMINA? Ciertamente que en nuestro escribir y hablar con siglas que encierran los verdaderos nombres de lo que significan, muchos pueden verlo como clave que descifrar y se pueden quedar sin saber el contenido del significado. CEMINA significa Centro Misionero Nacional.

                Hablar del CEMINA es hablar del esfuerzo misionero de las Conferencias Episcopales que se preocupan de formar, animar y coordinar el trabajo misionero, a través de hacer de la dimensión misionera un eje trasversal para las distintas pastorales que se mueven en las Iglesias particulares. en nuestro caso, de la Conferencia Episcopal del Ecuador.

                En la historia misionera de este cuarto de siglo del CEMINA, no podemos olvidar a los que iniciaron en poner en marcha este camino en la Conferencia Episcopal del Ecuador como lo pedía la Iglesia desde Roma. Fue Mons. Frumencio Escudero  Arenas, obispo emérito del Vicariato Apostólico de Puyo, que no fue fácil como el nos contaba,  igualmente  que no  lo es hoy, entender y trabajar  uniendo fuerzas en la misma dirección, sabiendo que no buscando protagonismos personales, sino acompañar el trabajo misionero de nuestra Iglesia  y hacer florecer especialmente  la misión ad-gentes en nuestros cristianos y comunidades a través de las distintas formas y manifestaciones desde las diferentes fuerzas de los organismos eclesiales.

                Sabemos que la Iglesia Católica como institución lleva siglos trabajando en este mismo fin,ya en Roma ,en el  1622 se funda la Sagrada Congregación para la Evangelización  de los pueblos, llamada popularmente Propaganda Fide su primer secretario Mons. Francesco Ingoli emprendió la tarea de saber la situación eclesial y misionera de los territorios de misión del llamado “tercer mundo” y en 1818 surgían las OMP,Obras Misionales Pontificias con María Jaricot, que es el principal instrumento de la Iglesia para atender las grandes necesidades de los misioneros en los 1113 territorios de misión  que hoy cuenta la Iglesia Católica.

                Entendemos que todo trabajo bien organizado para una eficaz acción, requiere una descentralización dentro de la coordinación general y una buena comunicación, uniendo esfuerzos, evitando trabajos aislados y más bien apoyando el trabajo mancomunado con una pastoral de conjunto y conociendo la realidad particular de las diócesis o jurisdicciones eclesiásticas.

Por ello la Iglesia  pidió en su día, que las Conferencias Episcopales tuviesen un departamento o ámbito pastoral misionero  que facilitara en coordinación con las Obras Misionales Pontificias, cumplir su objetivo “coordinar y potenciar todas las fuerzas misioneras presentes en Ecuador, como medio evangelizador para una dimensión misionera “Ad-gentes” tanto ad intra como ad extra” estatutos 4,1.

Así como Ofrecer espacios para el compartir misionero entre las diferentes jurisdicciones a partir  de su realidad local con el fin de fortalecer el espíritu fraterno de la Iglesia misionera Ecuatoriana.

                Creemos que es fácil desentenderse de  una tarea que atender en  la propia casa ,cuando no se siente la necesidad  junto a mi alrededor  o no alzo la mirada para ver otros horizontes  o alguien que te invite a salir  de lo ordinario  y te proyecte a sintonizar  con realidades en las que la misión de llevar la buena nueva  y no contar con mensajeros que la lleven,  se ha vuelto una emergencia.

                Quisiéramos felicitar durante este camino misionero de los 25 años del CEMINA por los frutos que se han cosechado. Pensamos que se ha aumentado en nuestras jurisdicciones la toma de conciencia misionera  ad intra  y ad extra. La Animación y formación misionera ha sido un pilar  muy fuerte para despertar en nuestras comunidades el espíritu de ser una Iglesia en salida, fortalecer la fe  de tantos hombres y mujeres que en nuestras diócesis y parroquias se han incorporado al trabajo pastoral a través de convivencias, talleres, escuelas de formación misionera y a través de nuevas metodologías como las Santas Misiones Populares.

                Hemos de reconocer también el valioso aporte de cooperación por parte de algunas diócesis ecuatorianas, cuyos obispos con un corazón misionero se han abierto a enviar sacerdotes diocesanos a territorios de misión ad-gentes  como son nuestros Vicariatos Apostólicos en Ecuador, creemos que esto es un avance cualitativo aunque queda mucho por hacer.

Podemos decir que un cristiano llega a ser maduro en su fe, en la medida que es capaz de salir a compartirla con otros que la necesitan, si eso lo decimos de  nuestros laicos, como no también decirlo de nuestros hermanos sacerdotes. Debemos potenciar más la dimensión misionera en nuestros seminarios  y presbiterios como nos pide hoy  reiteradamente el Papa Francisco y la Iglesia lo necesita.

                Otro fruto del CEMINA que no podemos olvidar, es la instauración oficial en el Ecuador, de la celebración del “Día del misionero ecuatoriano ad-gentes”, aprobado por la Conferencia Episcopal del Ecuador  el 12 de junio, fiesta que nos hace tomar conciencia a todos los ecuatorianos de la vocación misionera y  que debemos apoyar a nuestros misioneros y misioneras que como los mejores embajadores de nuestra Iglesia ecuatoriana ,nos dan ejemplo  para imitar por su valentía y su entrega generosa de salir al encuentro de los más necesitados, imitando así a Jesús  primer misionero del Padre.

                También hay que reconocer, que para un trabajo eficaz en el caminar misionero, como decíamos,  es necesario unir fuerzas  y juntos, caminar en la misma dirección , esto no siempre ha sido fácil  entre el CEMINA y OMP. dos instituciones que se deben complementar escuchar y compartir las tareas. Creemos que en los últimos años mejoraron estas relaciones y pedimos a Dios que nos dé a todos ese espíritu de servicio y humildad para seguir trabajando juntos por el Reino que Jesús nos ha mandado  construir en nuestro mundo.

                Felicitar a todos los delegados diocesanos de misiones y cuantos han colaborado en las distintas comisiones del CEMINA, para que después de 25 años podamos continuar con renovadas fuerzas sirviendo a nuestro pueblo y a nuestras parroquias en lo que es esencial en la vida de la Iglesia una fe misionera. sin Misión no hay misioneros y sin misioneros no hay Misión. La Vida es Misión y la misión es Vida. Vivamos con alegría este 25 aniversario, para ser evangelizadores de los pobres, como nos decía Jesús “he venido a llevar la buena noticia a los pobres “ y los pobres nos evangelizan. ¡ viva el CEMINA ¡ Viva la Misión ¡                

 

Monseñor Rafael Cob García

Obispo de Puyo

 

Powered by OrdaSoft!
facebook fb globe notification icon facebook logo png transparent background youtube logo icon png 11 mail

 

 

 

escudo vaticano vaticano Conferencia Episcopal Ecuador logo cer celam logo

Mena de Valenzuela N23-36 y Av. la Gasca,
Quito - Ecuador

Telf: +5932236109

info@ompecuador.org

© Obras Misionales Pontificias. Todos los derechos reservados.
desarollado por My Media Kitchen   •   "Royalty Free Music from Bensound"